martes, 28 de enero de 2014

Cuando un huerto puede ser un jardín


    
Panorámica del área silvestre de nuestra casa
 
     La semana pasada navegando por blogs de jardinería ecológica, tuve la fortuna de dar con una joya, y un autor que no conocía, Jesús Arnau. Reconozco que estoy encontrando en su lectura muchas afinidades y satisfacciones, que me hacen motivarme en los próximos trabajos con el jardín en casa, una vez dejado atrás un invierno más. "Cuando un huerto puede ser un jardín", es una sencilla aproximación a la jardinería natural y a sus numerosas y gratificantes posibilidades.
     Estoy de acuerdo con Jesús que resulta fundamental permitir un diálogo continuo entre la naturaleza y nosotros. A menudo la naturaleza parece querer llevarnos la contraria haciendo que una planta soñada por nosotros no funciones en el jardín. Otras son los insectos los que parecen estar en guerra con nosotros. Y, sin embargo, cuando vamos aceptando las 'reglas del juego' presentes en el medio natural, gradualmente entramos en el fluir de como ocurren las cosas de verdad. Dejamos de luchar  y resistirnos, y empezamos a comprender que la jardinería natural es una oportunidad de acercarnos a las leyes naturales de la vida.

Milenramas y espuelas de caballero junto al ginko en la valla delantera


      Por ejemplo, cuando empezamos a manejar sencillas asociaciones de plantas, hortalizas diferentes o plantas ornamentales mezclada con hortalizas en el mismo bancal, nos damos cuenta que sucede como en la vida nuestra, que realmente hay más química entre unas personas que entre otras. Se trata de ir averiguando que plantas precisan qué nutrientes para poner cerca las plantas con necesidades distintas. Por otro lado, precisamos poner juntas plantas con necesidades de agua similares o de terreno.
 
Caléndulas anuales e Iris vivaces entre groselleros blancos

         La convivencia de la jardinería ornamental con el huerto ha de sacar lo mejor de ambas; podemos jugar con el diseño curvilíneo de los caminos secundarios para dar más ligereza y movimientos a los bancales. Al acolchar con gravilla blanca los caminos se libran de cantidad de adventicias -y nosotros de trabajo extra- y al tiempo, se crea un efecto de más luminosidad, positivo para el ánimo al trabajar (en especial en los cortos días de otoño e invierno). Trataremos siempre de conjugar los aspectos prácticos (de orden y eficacia para poder hacer las tareas en el huerto-jardín) con la manera de conseguirlo a través de un toque de belleza artística, imaginativa.
 
 
 
       Todo jardín comestible se verá realzado con la presencia de un estanque u otro elemento acuático suficientemente vistoso. Será un foco de belleza y entretenimiento, además de proporcionar un punto importante al desarrollo de la vida silvestre. Los estanques son altamente productivos y fértiles, ofreciéndonos un agua de riego nutritiva para nuestro huerto. También podemos dirigir a ellos parte del agua de lluvia que cojamos en el tejado de la casa.
 
 

          Queremos con estas líneas animaros a que forméis parte de los numerosos 'obreros verdes' que disfrutamos creando vida allá donde vivimos. Nuestras amistades y familiares podrán beneficiarse de instantes de belleza cuando nos visiten, y a veces les sorprenderemos con algún que otro apetitoso regalo para la mesa.
    Ahora que el invierno empieza a dejarnos atrás, preparémonos para la gozosa faena, y empecemos a instalar los semilleros de flores y hortalizas que, en unas semanas darán nota de color y vida al jardín. Miremos bien donde hace falta que aportemos estiércol o acolchado nuevo, así como que rincón precisa de remodelación, y donde podemos poner anuales nuevas que con sus flores nos darán ánimo para seguir creciendo juntas.
 

miércoles, 22 de enero de 2014

'Al menos una vez en la vida, toda persona debería recibir una ovación, porque todos vencemos al mundo'

 






"Al menos una vez en la vida, toda persona debería recibir una gran ovación, porque todos vencemos al mundo" August Pullman
 
     A menudo las personas se marcan retos inalcanzables, y no porque un reto lo sea sino porque al perseguirlo uno huye de su propio corazón. Por mucho que ganemos en habilidades y recursos, si nos vaciamos de compasión hacia la vida, las metas se hallarán siempre lejos. Necesitamos conocer en esencia de que trata la vida, y eso sólo puede hacerse desde un estado de paz y reconocimiento hacia todo lo que nos rodea.

 
 
 
 
 

      Primero, lleguemos a sentir que la vida siempre está de nuestro lado, incluso en medio de las experiencias más incómodas, que están ahí para corregir algo en nuestra expresión vital. Estos 'correctivos', sean accidentes o conflictos, nos obligan a pararnos para reconducir la dirección que llevamos. Podremos empezar a apreciar entonces que cada situación es perfecta para quien la está viviendo, no la juzguemos pues, y sepamos estar sin hacer mucho ruido en medio de ese escenario que por lo que sea nos llega en un momento dado.
 
 
     Segundo, no demos por supuesto que lo que ocurre o vemos es lo que parece. A menudo, el significado de una experiencia es profundo y complejo, no pretendamos racionalizarla, estamos en ella plenamente, dejando que nos nutra y nos modele. Tal vez así podamos sentir qué mensaje concreto necesitamos recibir.
 
 
     Es como cuando leemos durante unos días un libro, sumergiéndonos en una historia de vida paralela a la nuestra, e inevitablemente mezclándolas, como los sueños nocturnos con la vigilia activa. Al leer también soñamos, quizá para encontrar una trama suelta con la que aprender a tejer mejor el 'Sueño' que llamamos nuestra vida. Esa historia leida es un viaje a otro lugar, desde donde poder contemplar nuestra vida con observación desapegada; pero es bien real, porque puede emocionarnos y movernos el corazón más que mucho de lo que ocurre en la vigilia cotidiana.
 
  

jueves, 16 de enero de 2014

El arte de regalarte la felicidad en cualquier momento

 
     Se dice que el ser humano ha venido a esta vida a aprender, o a crecer.. también a aprender a amar. Y es cierto , y más expresiones que nos puedan venir. Y con todo, y más en estos tiempos de aparente negatividad en todo el planeta, hemos de reconocer que realmente hemos venido a gozar.
    Y, en medio de todos los desafíos cotidianos, la madre tierra siempre está ahí para apoyarnos y recordarnos que la vida en sí es pura ananda, o felicidad.
 
 
 
 
    Desde el instante único del nacimiento, la vida nos espera para que disfrutemos de los muchos regalos que guarda para nosotros. Nos hace guiños continuamente para que podamos reconocer el torrente de alegría que inunda todo momento.
     Para que, como niñ@s, podamos dar rienda suelta al instinto de pura alegría que somos. Llegar a estar en compañía de otros como nosotros, que también son pura felicidad.  
 

 
 

martes, 7 de enero de 2014

¿Para qué practicar feng shui hoy en día?


 



          A menudo al oír sobre el feng shui, podemos pensar que se tratan de 'recetas' exóticas para conseguir el éxito rápido, o técnicas que pueden funcionar en otras culturas pero no en la nuestra. A veces las personas se quedan en la superficie tras leer algún libro, y sólo se fijan en la decoración, en crear ambientes más armoniosos o en la colocación de un espejo o una fuente para lograr algún efecto rápido en un área de su vida.
    Lo que más nos cuesta a los occidentales para acercarnos de buena manera al feng shui, sucede también con el chamanismo, la meditación o el yoga. Vamos demasiado deprisa por la vida, y casi siempre queriendo racionalizarlo todo. Nos inquieta el pararnos y sentir.. quizás intuimos que al practicar un enfoque con autenticidad, no sólo cambiaremos nuestro entorno, sino que también seremos transformados por el camino. Y eso da miedo.
 
 
De alguna manera como el caracol, allá donde vamos llevamos nuestra 'casa' a cuestas, nuestras vivencias de la casa materna y  de otros hogares que nos modelaron más de lo que creemos. Hemos de balancear si aquellas son cargas o valiosos dones.

jueves, 2 de enero de 2014

Aprender a cambiar de marcha antes de volver a los desafíos en nuestro camino

   
 
 
 
        Hace unas horas estamos en casa esta mañana ocupados en retomar la remodelación del rincón del comedor, para habilitar un rincón mejor para el trabajo con ordenador. Valoramos los pros y contras de un diseño u otro para el 'mueble' que puede ir en esa esquina, junto a la mesa y la ventana.
     Nos recordamos que justo ahí entra la energía del oeste (hijos y creatividad, proyectos y todo lo bueno de la vida que nos da gozo sin enganches..). Como hacer que esa energía de la vida nos nutra y alimente mejor (estamos en la habitación del comedor), que sepamos recibirla, pudiendo integrar en un mismo espacio distintas actividades..
    Busco un libro que no encuentro, me encuentra otro a mí.. es un vieja conocida: 'La Medicina de la Tierra' caminos de armonía de los nativoamericanos, hoy tras unos meses dormida de nuevo se despierta y nos arrulla.
 
 Abrimos por una página y leemos:
De Jamie Sams, EL CIELO DE LA NOCHE (9ª LUNA-13)
 
En la profunda oscuridad
Toco la cara
De la Cúpula de la Medicina llena de estrellas.
El cielo nocturno se me abre,
La Creación fluye por mi cuerpo de mujer.
La luz centelleante de las estrellas baila,
Animando al hombre del interior:
Mis sentidos gritan con viveza.
Estrellas que explotan
Encienden fuegos
Que bordean este camino
De éxtasis, todavía adecuado.
El útero del oscuro cielo atrae,
Al nacimiento silencioso del que
Todavía no ha tomado forma.
Tirándome hacia el profundo Vacío
Sin ningún consuelo ni garantías,
Aprendo a confiar en el eterno proceso.
La belleza de la emergencia es un misterio
Que puedo soportar alegremente
 
Porque me llevará al hogar.

miércoles, 1 de enero de 2014

2014 nace: ¿Qué deseamos de verdad aportar al mundo?

 


 


 




    Acabamos de brindar por el nuevo año que comienza. Aunque para nosotros en casa no refleja el inicio del ciclo natural (lo festejamos en Samhain y en febrero con la primavera china), no deja de marcar el día 1 de enero un hito en el inconsciente colectivo de potencial apertura. Durante al menos unas horas las personas con su disfrute y alegría dejan al margen su mente para que no se enfoque en lo negativo, en lo que estamos acostumbrados a que nos bombardeen los 'mass media'.
    En feng shui, el mes de enero con la energía del aquietamiento de la montaña, nos abre un período mensual para hacer balance de nuestro viaje. Sintonizándonos con el final del invierno en la naturaleza, y desde el mayor silencio sin juicio que podamos abrazar, aspiramos a renacer en primavera llenándonos de verdor, vitalidad y ganas de disfrutar de la vida.
    Es bueno que nos preguntemos, ¿Qué deseo ahora aportar de positivo al mundo? Con alegría y fantasía, que la medicina del hermano lagarto pueda inspirarnos para tejer sueños lindos y que ayuden a los demás a caminar con belleza por la Tierra.
 


     La energía de la montaña también nos enseña a acumular poder individual a través del cultivo del no hacer, en soledad y silencio. Estos son terapéuticos y necesarios, como alimento diario, que sin embargo esta sociedad tiende a rechazar, contaminando de continuo nuestra mente y corazón con infinitos mensajes de lo consumible..
     Plantéate qué quieres innovar en tu vida, aportando una o varias genialidades tuyas a la sociedad.., marca huella y camina con pies enraizados,  pecho abierto, mirada clara, mente serena y la palabra dulce.
 


     Desde esta ventana que es este querido blog, nosotros aspiramos a poder acercarnos en mejor hermanamiento con la tierra, llegar a respirarla de cerca, a sentir su amoroso cuidado diario. Por ello, nuestra intención gozosa es que esta 'brújula y sus 8 caminos' puedan inspirar cada día a que más almas elijan crear su mundo, con corazón e ilusión de la buena. Hoy es otro buen día para hablar con tu casa, y preguntarle que necesita, que le apetece que tú le des.. seguro que te contesta, puede que te sorprenda!!





    Regala un canto a la Vida, y disfruta tú con él. Siembra tus pensamientos geniales y deja que tus sentimientos más preciados viajen con el hermano Viento, lejos, hasta el hogar que pueda necesitarlos ahora.
 
Con amor y ternura.