miércoles, 13 de noviembre de 2013

Taller feng shui vivencial (7): Cocreamos

 

 
    El domingo por la mañana retomamos nuestro aprendizaje tratando un aspecto importante: el manejo de la intención. Lo creamos o no, atraemos en la vida lo que pensamos. Cuando nos responsabilizamos de nuestras pautas de vida, es importante que cuidemos con consciencia pensamientos, sentimientos y actos para llegar a convertirnos en quien realmente somos. Es una cuestión de soberanía personal, y en feng shui la intención nutre    los cambios que hacemos en el espacio con fuerza y dirección.     

 
     Por ello, hemos de aprender a cocrear de la manera mejor para nuestras aspiraciones y en favor del mejor bien de los implicados en nuestras decisiones. Un apoyo para este trabajo lo encontramos en la fuente tolteca, y en concreto en el trabajo que el Dr. Miguel Ruiz ha expresado en 'Los 4 Acuerdos': Impecabilidad de pensamiento y palabra, No tomarse nada personal, No dar por supuesto y Hacer lo mejor posible en cada momento. Parecen sencillos, y lo son, y contienen una profundidad de fuerza que crece cada día que los practicas. Nos ayuda a vernos en numerosos patrones limitantes, que hemos de cuestionar radicalmente, si en verdad queremos aspirar a una vida plena, abundante y dichosa.
 
 

     Después, hablamos, siguiendo la especialista en feng shui intuitivo Denise Linn, de como crear un patrón energético en nuestra casa, para atraer una cualidad que queremos incorporar ya a nuestra vida. Esta puede ser: alegría, pasión, orden, calma, aventura, sencillez, etc. Si nuestro hogar respira esa cualidad, cada día que entremos por la puerta nos estaremos nutriendo de ella, y nos será más fácil incorporarla en nuestra persona y nuestras acciones.
    Cada pequeño gesto que hagamos para que nuestra casa exprese esa cualidad, nos está acercando un poco más hacia a esa realidad. Este trabajo nos ayuda también a ser más cuidadosos con los mensajes que transmiten los diferentes objetos que tenemos en casa. Hemos de estar bien atentos para que éstos transmitan positividad, vida, alegría, calma,.. en vez de sus valores opuestos.
 
 
     Con la dinámica 8, llamada 'Mi Cada del alma o ideal', avanzamos un paso más en la vivencia consciente del espacio personal que estamos cocreando. Hacemos una sencilla relajación, para luego poner en pocas y sentidas palabras, como nos gustaría que fuera nuestro hogar ideal. La información que se nos revele, puede ser bien significativa de los cambios que en estos momentos necesitamos emprender.  
      Todos estos ejercicios de sensibilización e indagación en torno a nuestro espacio y nuestra relación con él, nos predisponen para sintonizar de forma precisa que tipos de ajustes feng shui hemos de hacer. Estamos preparados para avanzar hacia la siguiente fase de este viaje: Rehabitándonos.

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